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Foto del escritorBelia Press

Garabatto: «Para mí hacer música es como practicar el mindfulness: ¡es mi pasión!»

Actualizado: 12 ago 2023


El productor musical Garabatto (cortesía)



Belén Nebot / Claudia Peña. Castellón.


Javier Falquet (Gandía), conocido artísticamente como Garabatto, es productor musical. Ha producido canciones para cantantes muy conocidos como Mora (7 Lágrimas Remix, de Soge Culebra), Quevedo (Cuéntale), Luna Ki (Dispara), Dua Lipa (Love Again Remix), Aitana (Formentera Remix), Pol Granch (Desconexión) o Chema Rivas (Ya no es lo mismo), entre otros.


Falquet se define como artista, ya que más allá del trabajo que hace, hay un criterio y una manera de hacer que pertenece al ámbito artístico. Su pasión por la música siempre estuvo en él desde que era niño, le gustaba mucho tararear melodías o tocarlas en un piano de juguete que tenía. «No sabía que podía crear cosas con ello hasta que apareció la producción en mi vida y vi que podía aterrizar todas esas ideas en algo más tangible», asegura el productor.


Se empezó a interesar en el mundo de la música a raíz de observar a un vecino suyo tocar el piano. «Cuando iba a su casa, empecé a tocar yo también y mis padres veían que me hacía ilusión todo aquello. Entonces, me apuntaron a música y, de ahí, al conservatorio». Una vez acabó el conservatorio, decidió llevar todos sus conocimientos a otro territorio.


En el mundo de la electrónica es muy común tener un alias, es decir, no usar tu nombre real. Garabatto afirma que le costó encontrar el suyo: «Tuve una época gamberra en la que pintaba graffitis (ríe) y tenía otro nombre. Cuando quise empezar en la música y hacer cosas más serias, busqué un nombre nuevo. Estuve escribiendo nombres inventados y ninguno me convencía. Entonces, empecé a rallarlo todo y me quedé mirando la hoja y pensé que tenía bastante sentido (ríe). ¡Esa hoja era arte porque tenía un garabato hecho sobre todo lo que había fallado!», dice entusiasmado.


El productor reconoce que su familia entendió su trabajo muy tarde y está agradecido por que ese momento llegara. Cuando empezó a tener oportunidades internacionales, sus padres no lo entendían, por mucho que Falquet se lo explicara: «Al principio, mis padres eran bastante rectos en el sentido de que querían que tuviera “un trabajo de verdad” y saber lo que cuesta ganar el dinero. Yo les decía que me apetecía “deslomarme” y descubrir lo que me estaban contando, pero en este territorio. Por entonces, estaba estudiando Magisterio y les pedí hacer un año sabático, que en realidad era un poco trampa porque yo quería dejarlo y enfocarme en la producción (ríe)», afirma Falquet. Cuenta que ese año le fue muy bien, ya que todas las oportunidades fueron hacia adelante y entró en un circuito que a día de hoy le ha conducido hasta donde está. «Estoy muy contento de haber arriesgado, aunque en ese momento mi familia no lo entendiera. Además, mi definición del éxito no es la misma que la de ellos (ríe). Les podía contar que estaba trabajando con gente que para mí es increíble, pero como no los conocían, no entendían muy bien por qué estaba tan contento ni de la magnitud de eso. De hecho, el momento en el que entendieron algo fue cuando salí en Operación Triunfo. Cuando me vieron en la tele dijeron: “¡Ostras! ¿Qué hace mi hijo aquí?”. Alucinaron (ríe)».


El productor musical Garabatto (cortesía)


Garabatto habla sobre su referente en el mundo de la producción: Skrillex. «Es mi padre, pero no lo sabe (ríe). Me parece que es la persona con el pensamiento más out of the box de los últimos años».


El productor asegura que para producir una canción puede tardar desde media hora hasta tres meses, según como le «pille» la inspiración. «Lo comparo con hacer un sudoku. Puede ser muy fácil o te partes los cuernos, lo dejas y vuelves varias veces y dices: “¡Aquí qué pasa!” (ríe). Se puede complicar mucho la cosa. Hay veces en las decisiones creativas cuando va todo encarrilado y, de repente, viene alguien y dice: “¿Y si hacemos…?”. Ahí viene lo que tumba todo (ríe). Hay veces que sale bien y otras que no, pero te lo pasas muy bien siempre que estás en ese proceso».


Para Javier Falquet la música tiene un gran significado en su vida. «Para mí hacer música es como practicar el mindfulness: ¡es mi pasión! Puede sonar muy global, pero tiene esos ingredientes que me permiten desconectar del mundo, del tiempo, de lo que pasó hace una hora o de lo que pasará. Me permite estar en el aquí y el ahora. Es una situación que comparo a cuando los bebés juegan: solo existe el juego y el juguete, no hay espectador, ni tiempo, ni preocupaciones», reconoce el artista.


Actualmente, en la industria musical es complicado hacer canciones diferentes, aunque a Garabatto lo que le parece difícil es «entregar eso diferente de manera que sea comprensible y disfrutable, menos contaminada por los demás y única». Cuando se ha puesto presión a sí mismo, es cuando peor le han salido los temas: «Cualquier cosa que te aleje de ese “estado de bebé” que decía, cuando empiezas a condicionarte de que la canción tiene que ser buena, de que tiene que gustar… Dejas de disfrutar el juego. Si algo no es bueno, se descarta, se prueba otra cosa y sigues jugando. Habrá días espectaculares y otros que no, pero los que no lo son, no me castigo, porque si no, no disfrutaría del camino. Incluso en las sesiones que no sale nada, pienso en que la gente con la que he estado se ha llevado una buena experiencia en general», expone el productor.


El productor musical Garabatto (cortesía)


Falquet afirma que lo que más le gusta del mundo de la producción es el Sound Design: «¡Me vuelve loco! Puedes crear instrumentos con las propiedades que quieras y hacer que evolucionen, ¡que empiecen de una manera y acaben de otra! También me parece interesante hacer Sound Design sobre la vocal, que es el instrumento al que todo el mundo presta atención». Respecto a lo que menos le gusta, afirma que es un «enfermo de la optimización» y cualquier proceso que para obtener el resultado le lleve más de cinco minutos le parece «una fatiga tremenda». «Estoy trabajando en ser lo más rápido y eficiente posible, cualquier cosa que no pueda hacer rápido me supone un resquemor… (ríe)».


Garabatto dice que se enamora siempre del tema en el que está trabajando y «odia» todo lo anterior. «Mi canción favorita es la que estoy haciendo ahora mismo. Cuando sale, es como la sensación de cuando te acabas una serie que dices: “¿Y ahora qué?”. Hay tanta energía puesta en cada tema… Aún así, si tengo que juzgar todo lo que he sacado, creo que el remix que hice a Luna Ki de Dispara tiene toda la locura que le pude poner y más (ríe). Recientemente he sacado un tema que se llama Ya no es lo mismo, diría que es la puerta hacia la dirección de creación que estoy tomando ahora mismo y que representa cosas muy troncales en el proyecto», asegura el artista.


El productor tuvo la oportunidad de participar en el remix de 7 lágrimas de Soge y Mora. Cuenta que esta producción fue súper rápida: «Recuerdo que Mora le escribió a Soge cuando descubrió la canción y le dijo que le mandase los stems. Soge me llamó, se los pasé y a las tres horas nos mandó el resultado final». Cuando se despertó al día siguiente, ya estaba lo que iba a ser «la vocal final». «Tuve que hacer arreglos, integrar eso en la canción y ya está. ¡Fue increíble lo rápido que lo hicimos!».


De izquierda a derecha: el cantante Soge Culebra, el artista Mora y el productor Garabatto en un concierto (cortesía)


Afirma que con todos los artistas que ha trabajado, hay quien le ha sorprendido en «direcciones diferentes». Reconoce que Soge Culebra le parece increíble: «No sé cómo lo hace, tiene un autotune en la garganta y todo lo que dispara hace dibujos bonitos». Raúl Gómez también es un artista que le gusta mucho. «Son gente que hacen muy buena sintaxis de lo que quieren hacer y lo hacen». Luego hay una persona que admira desde el principio y, además, ha tenido la oportunidad de trabajar con él, este es Leroy Sánchez. «Es impresionante, lo tiene todo: ¡canta y ha trabajado con un montón de gente importante!».


Garabatto también hizo el remix de Love again de Dua Lipa y cuenta que eso también fue una serie de fenómenos paranormales, pero, ¿cómo llegó a producir para la artista británica?. «La historia está en que el Real Madrid fichó a David Alaba y la hermana es cantante, que se llama Rose May y tiene muchísimo rollazo cantando. En el momento en que lo ficharon, preguntaron por productores en España y pasaron varias propuestas, la mía le gustó afortunadamente y le hice un remix a un tema que se llamaba Lemonade. Resulta que el manager es el mismo que el de Dua Lipa y le gustó mucho el trabajo. Fue un trato muy humano, afortunadamente las relaciones que he tenido han sido muy cercanas».


Falquet afirma que ser buen productor es un poco subjetivo. Para él, ser un buen productor significa tener conocimiento en todas las áreas posibles, cuanto más «chetado» estés en todo lo medible, mejor serás. Reconoce que una cualidad que más echa en falta en los productores es conocimientos en teoría musical. «Hay mucha gente con conocimientos en la parte técnica, herramientas y todo esto, pero hay ciertos conocimientos de la composición o armonía que te permiten leer la canción en otras diagonales. Todas esas lecturas enriquecen mucho y pienso que le vendrían bien a bastante gente», afirma el artista.


Grabatto lanza un mensaje para todos aquellos que están empezando a producir, dice que es importante que disfruten del camino y que no se agobien con la meta porque «nadie les está esperando». «Elimina la expectativa, aprende todo lo que puedas, intenta ver todo con ojos de curioso para saber dónde quieres llegar y ver si vas por buen camino», aconseja el productor.


Javier Falquet afirma que ahora está bastante centrado en su proyecto: «Me gustaría sacar un álbum y popizar la electrónica o electronizar el pop, ambas me parecen bien. Ya hay parte de eso en lo que estoy sacando. Me gustaría mezclar artistas y maneras de hacer diferentes». Aparte de eso, cuenta que está haciendo más cosas: ha trabajado en el álbum de Quevedo y en el de Soge. También tiene una canción con Black Panda que «Dios quiera y ojalá vaya a Eurovisión». Reconoce que está en un circuito de gente muy sano y está muy contento de ello.



De izquierda a derecha: el productor Garabatto, el artista Quevedo, el productor Kiddo y el productor Hugo Bechstein en la presentación del álbum de Quevedo Donde quiero estar (cortesía)

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1 Comment


david11645
david11645
Jan 28, 2023

Como se nota que habéis aprobado Géneros,buena entrevista 👏👏👏

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